¿Sin sangre y con ojos en cada brazo? Las curiosidades extremas de las estrellas de mar

Las estrellas de mar son animales curiosos que no tienen sangre ni cerebro, pero pueden regenerar sus brazos e incluso digerir alimentos fuera de su cuerpo.

Se mueven usando un sistema hidráulico y ventosas, y algunas especies pueden tener hasta 40 brazos. Además de vivir en agua salada, son capaces de detectar la luz y la temperatura a través de sus brazos.

 
Datos curiosos sobre las estrellas de mar:
Sin cerebro ni sangre: A pesar de su apariencia, no tienen cerebro ni sangre, sino un sistema vascular acuífero que les permite moverse y obtener alimento.

Digestión externa: Poseen un estómago que pueden sacar por la boca para digerir a sus presas, como almejas, ostras y mejillones, fuera de su cuerpo.

Regeneración: Pueden regenerar sus brazos perdidos, y algunas especies pueden incluso regenerar un cuerpo completo a partir de un solo brazo.

Ojos en los brazos: Tienen ojos al final de cada brazo, aunque no son capaces de ver como los humanos.

Movilidad: Se desplazan con la ayuda de cientos de pequeños pies ambulacrales con ventosas que les permiten adherirse a las superficies y moverse con precisión.

Múltiples brazos: Aunque muchas tienen cinco brazos, algunas especies pueden tener hasta 40, como la estrella solar.

Sensibilidad: Sus pies ambulacrales les permiten ser sensibles al tacto, la luz y la temperatura.

Reproducción: Se reproducen de dos maneras: sexualmente, liberando óvulos y espermatozoides al agua, y asexualmente, a través de la regeneración.

Control poblacional: Son depredadores voraces que ayudan a controlar las poblaciones de moluscos en los arrecifes de coral y otros invertebrados.