Rodrigo de la Cadena revela 'encuentro íntimo, de almas' con Juan Gabriel

El cantante y compositor Rodrigo de la Cadena reveló que luego de compartir escenario con “El Divo de Juárez” Juan Gabriel durante un homenaje y entrega de la medalla “Agustín Lara” tuvo la fortuna de vivir un momento muy íntimo, lindo y agradable hace diez años que subrayó “punto y aparte de lo que se pudiera suponer, fue un encuentro de almas”.

En entrevista con la periodista de espectáculos Addis Tuñón, en el programa de Primera Mano,  con la naturalidad de un hombre que "no se pone límites", Rodrigo de la Cadena reveló un encuentro íntimo y memorable que asegura que sostuvo con Alberto Aguilera Valadez, al término de un evento y de una cena que ambos compartieron, para luego  invitarlo a su habitación.

“Y me acuerdo que estaba Juan Gabriel sentado y la viuda de Agustín Lara, en un como un trono que le habían puesto, y en vez de yo cantarle a Juan Gabriel, me fui a cantarle a Gigi. Entonces me iba yo a cantarle a Yolanda… Yo no sé si eso así como para molestarlo, pero creo que le encantó. Le fascinó que yo fuera así y me lo dijo después; me dijo: ‘Te invito a cenar a mi casa’. Y me acuerdo que me invitó a cenar a mí, a la viuda de Agustín Lara, al maestro Eduardo Magallanes, que es mi gran amigo, director de orquesta, compositor. Después dijo el maestro Magallanes y su esposa: ‘Bueno, nos vamos. Gracias, estuvo muy rica la cena’. Y yo me quedé con él solo”.

Detalló que Juan Gabriel le mostró su casa y narró que posteriormente, hasta le untó aceites aromáticos y le “alineó los chacras”:

“El inicio fue muy simpático, porque fue todo muy ‘huele, mira estos perfumes y estas esencias y estos aceites’; y me los me los embarraba aquí en la espalda y me hacía masaje. O sea, era un cuate a todo dar. Seductor. Sí, sí, sí, sí, sí. Entonces me empezó a... Se ponía aceites y me decía: ‘Mira, huele’. Y se ponía atrás de mí, sí. Y después me alineó el chacra… Así me hacía: ‘Te voy a alinear los chacras’… Pues hacía como unos rituales, primero estaba todo de blanco y luego tenía como velas y tenía cosas, era muy esotérico”, recordó.

“Y obviamente, el show era él, o sea, que le caí muy bien y fue demasiado cariñoso, en exceso conmigo… Me enseñó la habitación, me dijo: ‘Mira cómo cambié, cómo transformé todo el cuarto… Y me dice: ‘Mira, por ejemplo, esta cama estaba aquí y yo la puse aquí porque que mira, ponte aquí, siéntate aquí. ¿Sientes la energía?’ Sentía más la energía de él”, agregó a los detalles.

“Salí en la madrugada y había gente esperándolo. Había gente esperándolo durmiendo afuera de la calle con tal de verlo .. Que ya se habían ido todos… Tuvimos una un momento muy lindo, un momento muy agradable, un intercambio muy agradable, muy agradable, tan agradable que hasta se me olvidó… Estábamos ensimismados”, concluyó.