Luis de Llano pierde batalla legal: tendrá que disculparse con Sasha Sokol

Luego de un proceso legal que se extendió por casi tres años, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ratificó la sentencia en contra del productor Luis de Llano por el daño moral causado a la cantante Sasha Sokol, cerrando así de forma definitiva el caso en el ámbito judicial.

La demanda fue iniciada por Sokol tras hacer pública, en marzo de 2022, una relación que sostuvo con De Llano cuando ella tenía 14 años y él 39. Aunque el productor admitió el vínculo en una entrevista con Yordi Rosado, lo calificó como consensuado, versión que fue desmentida por la exintegrante de Timbiriche, quien denunció haber sido víctima de abuso de poder.

En 2023, un juez civil determinó que, efectivamente, existió daño moral y abuso de autoridad, debido a la condición de menor de edad de Sasha y la posición jerárquica que tenía De Llano en su carrera. La sentencia fue apelada por el productor, pero tanto el Tribunal Superior de Justicia como ahora la SCJN confirmaron el fallo original.

Como parte de la resolución definitiva, Luis de Llano deberá cumplir con varias medidas:

• Emitir una disculpa pública dirigida a Sasha Sokol, la cual debe publicarse en los mismos medios en los que él habló previamente del caso.

• Gestionar la eliminación del video de la entrevista publicada en YouTube donde abordó su relación con la cantante.

• Abstenerse de hacer cualquier mención pública sobre Sasha Sokol en medios, redes sociales o cualquier plataforma.

• Participar en un curso especializado en prevención del abuso sexual, enfocado particularmente en el trato con menores.

• Pagar una indemnización económica por el daño moral ocasionado, cuyo monto no ha sido revelado, aunque Sasha ha declarado que lo donará a organizaciones que apoyan a víctimas de violencia sexual.

La sentencia es definitiva e inapelable. De Llano ya no cuenta con más recursos legales para impugnar el fallo y deberá acatar en su totalidad cada una de las disposiciones ordenadas por el tribunal.

Este caso, que ha resonado ampliamente en la opinión pública, marca un precedente en la manera en que se enfrentan los abusos en la industria del entretenimiento y cómo las víctimas pueden buscar justicia, incluso décadas después.