¡El sexo se lleva mejor con MORDIDAS!

No hay nada peor que siempre estar haciendo lo mismo, hay que experimentar cosas nuevas, nuevas posiciones, nuevas sensaciones, y es que quieras o no al final se necesita un poco que ambos sean salvajes.

Y no es que nos pongamos sadomasoquistas, pero de vez en cuando no hace daño ser un poco agresivos, si aún no haces algo parecido como jalarle el cabello, nalguear a tu pareja, vendarle los ojos o simplemente morderla…. algo estás haciendo mal.

Si de morder hablamos, aquí te vamos a decir las formas en las que puedes hacerlo sin convertirte en chupasangre:

1.    Los mordiscos son muy útiles, aumentan el deseo y desborda la pasión.

2. Hay que controlar la saliva… porque a nadie le gusta un mordisco demasiado húmedo.

3. Procura hacerlo suave y tomar en cuenta que no a todas las mujeres les gusta el dolor.

4. Deben ser rápidos. Nunca los sostengas por mucho tiempo.

5. Está permitido morder las mismas partes del cuerpo que suelen besarse.

6. A ellas les gusta que les muerdan el cuello, la boca, los pezones, la clavícula y las nalgas.

7. Busca lugares donde sean sensibles para ella, como las orejas o la entre pierna, descubre nuevos lugares.