Diputadas proponen desaparecer los concursos de belleza en México

En sesión virtual, la diputada Wendy Zuloaga Briceño, presidenta de la Comisión de Igualdad de Género de Morena, dijo que los concursos de belleza son una "violencia simbólica contra la mujer".

Dijo: "Consideramos que certámenes y concursos de belleza, son eventos que exhiben a las mujeres en patrones socioculturales y bajo estereotipos de género, como un instrumento para enaltecer la concepción del cuerpo de la mujer como un objeto".

Con ese argumento, legisladoras del PRD y Morena, han propuesto la iniciativa por parte de la Comisión de Igualdad de Género de la Cámara de Diputados, de no otorgar más recursos públicos para la realización de concursos de belleza, ya que han considerado estos eventos como "difusores de violencia simbólica, pues aunque vemos a las concursantes muy sonrientes, las legisladoras consideran que en los certámenes de belleza se ejecuta violencia que es ejercida casi de manera normal y encubren relaciones de poder".

Y es que la comisión, que preside la diputada María Wendy Briceño Zuloaga (Morena), emitió su intención de voto a favor de tres dictámenes para incluir la violencia simbólica o mediática, reformas sobre paridad de género y consolidar el concepto de revictimización.

El primero, conjunta las iniciativas de las diputadas Beatriz Rojas Martínez (Morena), María Guadalupe Almaguer Pardo (PRD) y Frida Alejandra Esparza Márquez (PRD), para reformar diversas disposiciones de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.

De aprobarse la iniciativa propuesta, instituciones públicas ya no podrían asignar recursos públicos o meter publicidad oficial en la realización de estos eventos y de igual manera, alcaldes y gobernadores ya no volverían a coronar a las ganadoras de los concursos de belleza.

Es decir: "De prosperar, la propuesta obligaría a todos los niveles de gobierno a abstenerse de apoyar estos certámenes".

En la reunión de la comisión también se planteó solicitar a las instituciones educativas que prohiban los concursos de belleza, “como los reyes de la primavera”.